Reliv innova el acceso a la salud en LATAM
Hola, mi nombre es Martin y soy el cofundador de Reliv. Aquí te cuento mi historia sobre cómo empecé y crecí Reliv.
¡Hola! ¿Quién eres y qué negocio empezaste?
Hola, soy Martin Samaniego, cofundador y CEO de Reliv. Somos un ecosistema de salud que conecta al paciente con el médico y los prestados de servicios finales, como farmacias, laboratorios y aseguradoras.
Gracias a nuestras soluciones tecnológicas, el paciente puede gestionar su salud de manera rápida y eficiente desde una misma plataforma.
Reliv es utilizada por más de 900 médicos y casi 1 millón de pacientes.
Más de 500 mil consultas médicas han sido agendadas mediante Reliv.
Hemos integrado a nuestra plataforma a más de 50 clínicas y hospitales.
En 2021, Reliv fue parte del primer batch de la aceleradora ecuatoriana BuenTrip Ventures, y en 2022 formamos parte del batch 15 de 500 LatAm.
¿Cuáles son tus antecedentes y cómo se te ocurrió la idea?
Somos tres fundadores: Víctor Coronado, quien es mexicano y viene del lado tecnológico, Paola Almeida y yo. Paola y yo somos primos, ecuatorianos y médicos de profesión. Nuestras madres son emprendedoras y nuestros padres son médicos con empresas en salud; hemos estado expuestos a este mundo toda la vida.
Para seguir el legado de nuestros padres, decidimos irnos por el lado de la tecnología. Yo hice una especialización en Administración Hospitalaria e Innovación de Salud, mientras que Paola hizo una Maestría en E-Health y telemedicina.
Nuestros primeros usuarios fueron nuestros papás, doctores de 65 años de edad que no habían utilizado una computadora en su vida y tenían un cuarto lleno con historiales médicos en papel.
Así fue que nos unimos en 2016 con la idea de desarrollar un sistema de historial médico electrónico. En ese entonces, en Ecuador solo el 10 o 15% de los médicos utilizaban algún sistema, y la mayoría usaba Excel o Word. ¡Hemos encontrado médicos que aún utilizaban máquina de escribir!
Mi hermano nos presentó a Víctor, quien tenía un software factory en ese momento. Le enseñamos nuestros mockups hechos en Paint y él nos ofreció ser CTO y poner su equipo para crear la aplicación.
Hicimos un primer piloto, que era un sistema muy básico pero que cumplía las necesidades. Invitamos a nuestros papás y un grupo de 10 médicos para mostrarles el piloto, y les gustó.
A los dos meses teníamos 100 médicos y ya estábamos generando ingresos. La plataforma creció más rápido de lo que esperábamos y los costos de programación eran muy altos. Entonces Víctor nos dijo que necesitábamos un equipo in-house de tecnología; yo incluso hice un curso de nueve meses en software management para entender cómo hablarle a un programador.
¿Cómo pasaste de idea a producto?
Estábamos haciendo un montón de bootstrapping cuando llegó la pandemia. Entonces tocó pensar distinto: ¿cómo escalamos si no podemos ir a visitar médicos? Para ese entonces llevábamos 900 médicos suscritos, pero nuestra base de datos llegaba a un millón de pacientes.
En la pandemia fue muy evidente que el paciente no tenía cómo llegar al médico porque estaba encerrado, tenía incertidumbre y muchos médicos no hacían teleconsultas.
Entendimos que, para escalar, era un error enfocarse en un solo actor. Sobre todo en Latinoamérica, porque es un mercado tan fragmentado que resolver el problema de un actor no te deja escalar. En todo Latinoamérica hay un millón de médicos, que es un número pequeño.
En cambio, los 600 millones de habitantes en la región somos pacientes. El sector privado está creciendo, y viendo lo que pasó en la pandemia, decidimos que lo mejor era centrarnos en el paciente y dejar que el médico fuera una de las ramas del ecosistema de salud.
Si a cualquier persona le preguntamos dónde está su historial médico, no lo sabe. La legislación en casi todo el mundo dice que el paciente es el dueño de su información médica, ¿pero por qué nadie la tiene? Cuando vas a un nuevo médico tienes que pasar 20 minutos contándole tu historia de nuevo.
Empoderamos al paciente para que sea dueño de su información y sepa lo que puede hacer por su salud.
Nuestra idea es que con un click el paciente pueda compartir su historial médico, y que el paciente tenga a la mano todo lo que el médico le dé. Reliv permite que el paciente conozca los proveedores que tiene cerca. Le damos una mejor experiencia.
Describe el proceso de lanzamiento del producto
Con esa nueva idea comenzamos a construir esta aplicación. Entramos en 2021 al primer batch de BuenTrip Ventures, un programa de aceleración en Ecuador muy importante en el país.
Ellos nos dieron una visión global para estructurar el negocio y crecer a México. Ahí comenzamos a entender cómo levantar venture capital, porque como médicos no sabíamos que esto existía. BuenTrip es una buena academia para prepararte a crecer a otras aceleradoras o mercados.
Levantamos una ronda preseed, nos fuimos a México y eso nos ayudó para después entrar a 500 LatAm. Ahí han entrado cuatro empresas ecuatorianas en la historia: una en el batch 14 y tres en el batch actual. De los cuatro, tres pasamos por BuenTrip Ventures.
En 500 aceleramos todo lo que la empresa puede hacer de cara a pacientes y médicos. Desde marzo ya estamos operando en Ciudad de México, desde donde Paola está operando el negocio como nuestra COO. Al momento, ya tenemos nuestros primeros 40 médicos registrados.
Nuestra intención es ser un integrador de servicios de salud. A través de Reliv puedes integrar a farmacias, proveedores de virtual primary care, telemedicina, médicos, hospitales y aseguradoras. Es un one-stop shop para el paciente.
Desde el lanzamiento, ¿qué ha funcionado para atraer y retener clientes?
Siempre tuvimos el hack de que somos médicos y conocemos como piensan. Los primeros 500 clientes fueron ventas de Paola y yo, que estábamos visitando personalmente a los médicos.
Cuando el negocio creció, contratamos a dos personas muy buenas en costumer service e hicimos planes de referidos. También gracias a alianzas estratégicas comenzamos a crecer de manera masiva.
El tema de la retención es súper interesante en la salud porque, históricamente, esta industria es la que adopta más lento las tecnologías de manejo. Una vez que el médico adopta un sistema es muy difícil que lo cambie porque maneja toda su vida profesional; solo pensar en cambiar les genera ansiedad.
Los médicos que dejan nuestro sistema es porque se retiran. ¡La oportunidad es sorprendente! En México, ocho de cada diez médicos todavía no tienen historial electrónico.
No es cuestión de quitarle clientes a otros, sino de llegar primero a fidelizar al médico.
Para llegar a otros médicos que no son parte de nuestra red, nos hemos integrado con otros sistemas que ya están posicionados.
¿Cómo estás hoy y cómo se ve el futuro?
México es nuestro mercado target para los próximos 12 meses. La legislación es parecida a la de Ecuador y también tiene un mercado potencial. Es una industria de 40 mil millones de dólares de consumo en salud.
Hoy por hoy nos enfocamos en el tema de medicina curativa, pero en mediano plazo también queremos ir hacia el tema de salud preventiva. Buscamos que la app incluya temas de salud mental, reproductiva, física, fitness. Las nuevas generaciones a las que apuntamos ya consumen más temas preventivos.
Buscamos seguir creciendo nuestra comunidad y que cada vez más actores de la salud se integren a nosotros para proporcionar más servicios a los pacientes y agregar valor.
A largo plazo, nuestro sueño es ser el ecosistema más grande de la región. Ser el benchmark para que, cuando empresas gigantes como Amazon quieran hacer algo similar en Latinoamérica, nosotros seamos con quién compararse.
¿Consejos para otros emprendedores que quieren empezar o están empezando?
El emprendimiento no es tan fácil como se ve en todos lados; el camino no es únicamente levantar capital y crecer.
Tener una buena idea no es suficiente: hoy más que nunca hay que enfocarse en un producto que se valide en mercado y tenga una rentabilidad demostrada.
Es importante tener una buena planificación. Nosotros no empezamos este proyecto pensando en tener venture capital y crecer. Tener un plan estructurado desde el inicio te deja dar pasos más firmes y evita que cometas errores comunes, como gastar de más.
Finalmente, creo que es importante creer en tu idea y confiar en ti. Nosotros recibimos muchas críticas por ser médicos y estar emprendiendo, ya que nadie nos había enseñado a ser negociantes.
Entramos al emprendimiento con un pensamiento de autosabotaje, hasta que gracias a las aceleradoras entendimos que ser médicos no era una debilidad, sino nuestra mayor fortaleza, porque conocíamos el ambiente mejor que cualquiera.
¿Qué plataforma/herramientas utilizas para tu negocio?
Desde hace dos años tenemos todo subido en ClickUp. Ahí manejamos streams, distribución de tareas y automatización de servicio al cliente.
Slack para comunicación.
Para fundraising he estado usando Foundersuite y Notion para subir todo el material que se comparte a inversionistas.
¿Cuáles han sido los libros, podcasts u otros recursos que más te han impactado?
Venture Deals, de Brad Feld, fue nuestra Biblia cuando íbamos iniciando en el emprendimiento y no sabíamos nada.
Los podcast de Startupeable y The Frye Show los escucho todos los días para aprender de las historias de otros emprendedores y reflexionar sobre qué no hay que hacer.
¿Dónde podemos ir para aprender más?
Puedes seguir a Reliv a través de nuestra página web, Twitter y LinkedIn. Para ponerte en contacto conmigo, puedes encontrarme en LinkedIn.
- Martin Samaniego, cofundador y CEO de Reliv